Los Jardines de la familia Lin, formados por una mansión y un conjunto de jardines colindantes, son conocidos como los mejores del norte de Taiwán y uno de los pocos de su tipo en toda la isla.
Lin Pingho, un adinerado comerciante que había hecho fortuna con la venta de arroz y sal, encargó la construcción de los jardines, que tomó 5 años, entre 1888 y 1893. El señor Lin repartió la propiedad entre sus 5 descendientes, de los que únicamente 2 eran en realidad sus hijos. Los Jardines de la Familia Lin fueron diseñados siguiendo el estilo tradicional de los jardines de la dinastía Qing en el sur de China. Para su construcción, se emplearon materiales y trabajadores provenientes de la región China de Changzhou.
En la época, Taipei había visto florecer numerosas mansiones y jardines de estilo tradicional chino, construidas por comerciantes adinerados y con éxito en los negocios. Debido los desperfectos causados por el paso del tiempo y los numerosos desastres naturales que azotan Taiwán año tras año, la gran mayoría de estas mansiones fueron deteriorándose y se perdieron con el tiempo. Por suerte, éstos fueron restaurados en varias ocasiones, y conservan todavía gran parte de su aspecto y distribución original.
Para visitar la mansión es necesario concertar una visita guiada con antelación, pero los jardines pueden ser visitados sin cita previa. El lugar es una ventana al pasado más tradicional de la isla y a sus raíces chinas, y un marco perfecto para una tarde de paseo y relax. Merece la pena escaparse y caminar entre los estanques y admirar la arquitectura tradicional china, los jardines con bonsais, la piedra esculpida y la madera trabajada.
El recinto se encuentra en Banqiao, y se puede acceder a ellos caminando desde la parada de metro de Fuzhong, en la línea azul.